Argumenta que había llegado a un acuerdo "tácito" con los trabajadores por el cual ellos se comprometían a alargar su jornada laboral en caso de que el servicio lo pidiera sin cobrar el exceso.
En concreto, durante su última declaración como imputado ante el titular del Juzgado número 8 de Las Palmas de Gran Canaria, Salvador Alba Mesa, Ramírez acusó a un inspector de la Agencia Tributaria de citar a varios trabajadores de su empresa para preguntarles si cobraban dietas de verdad o si en realidad se trata de horas extra encubiertas para no cotizarlas. Al negar los empleados que la sociedad utilizara ese truco, el inspector -según el imputado- volvió a citarles.
“¿Si yo declaro ante el inspector de Hacienda y digo que son dietas, qué autoridad tiene el inspector para citarme de nuevo y presionarme?, se pregunto Ramírez ante el juez el pasado 4 de diciembre. “O declaras que son dietas o te abro una inspección”, insinuó el presidente de Seguridad Integral Canaria en referencia a los términos en los que se producían las supuestas amenazas del inspector de Hacienda.
Ramírez advirtió al juez que estos trabajadores incluso han dejado por escrito esas presuntas amenazas sufridas en un acta notarial que el dirigente de la Unión Deportiva Las Palmas aseguró que incorporaría al juzgado. “Los trabajadores fueron al comité de empresa y el comité fue a un notario”, aseguró.
Tras declarar Ramírez, el juez acordó imponerle una fianza de 35 millones, tanto para el presidente de la compañía como para el actual administrador
Durante su declaración, sin embargo, el magistrado insistió en que había trabajadores que habían denunciado ante el Juzgado “bajo juramento” que usted “les pagaba como dietas lo que en realidad eran horas extraordinarias”, acusaciones a las que Ramírez solo pudo responder aludiendo a un supuesto “pacto tácito” que la empresa había hecho con los empleados por el que éstos se comprometían a no cobrar horas extra cuando por necesidades del servicio había que extender la jornada laboral, extremo que han negado ante el juez algunos de los trabajadores.
El instructor insistió varias veces durante la comparecencia de Ramírez en que no entendía por qué éste no aportaba pruebas que demostraran que pagaba las dietas como dietas y las horas extraordinarias como horas extraordinarias. Hasta ahora, “nadie me ha pedido que yo demuestre esto”, dijo el presidente de Seguridad Integral Canaria, cuya primera declaración se produjo hace meses ante la juez Victoria Rosell, anterior instructora de la causa y actual cabeza de lista por Podemos en Las Palmas.
Tras tomar declaración a Ramírez, el juez acordó imponerle una fianza de 35 millones de euros, tanto para el presidente de la compañía como para el actual administrador, Héctor de Armas, también imputado en la causa, que investiga el supuesto fraude fiscal -cifrado en 21 millones de euros- en el que ha incurrido la empresa entre 2008 y 2013. El juez Alba Mesa ha reactivado la investigación después de que su antecesora llevara meses con el proceso paralizado.
Los informes de la Agencia Tributaria han acusado a Seguridad Integral Canaria de falsear la realidad contable de la compañía por medio del cambio de conceptos económicos. En concreto, los inspectores de Hacienda han señalado a la mercantil por presentar como dietas conceptos salariales que están sujetos a retención, lo que habría provocado que la compañía eludiera el fisco. En su declaración en sede judicial, el inspector de la Agencia Tributaria calificó de "estratosféricas" las dietas que abona la empresa.
Fuente: http://www.elconfidencial.com
Sindicato Profesional Vigilantes
SPV CADIZ
No hay comentarios :
Publicar un comentario